Etiquetarse como “Viejo” o “Joven” es algo irrelevante, porque nada tiene edad, en cualquier momento de nuestros días puedes vivir con intensidad, realizar el viaje de tus sueños lleno de aventura o, simplemente, leer un libro nuevo, crear un huerto.
Al pasar de los años, nuestras experiencias nos hacen madurar y somos testigos de como aquellas situaciones que anhelábamos cuando éramos niños, se convierten en la realidad de nuestro presente.
Comprendemos que no somos los únicos que sufrimos de estrés, felicidad, amor… que el mundo no gira a nuestro alrededor y que además hay gente que depende de nosotros. Pero todo esto es un aprendizaje que nos deja mucho sabor, satisfacción, y conocimiento para compartir con nuestros hijos, nietos, sobrinos, amigos, conocidos.
Es por esto, que hoy queremos traerles este texto, conseguido en nuestro navegar por internet de autor desconocido, el cual nos parece tan ilustrativo y valioso para entender que la vida es maravillosa, y que cada día es una oportunidad para aprender y disfrutar.
¨S.O.S.¨
Un Boeing 777 vuela sobre el Atlántico, en dirección a su aeropuerto de destino.
Su vuelo muy tranquilo y estable a 800 km / h y a 30,000 pies, se ve interrumpido cuando de repente aparece un F-18 a casi Mach 2.
El piloto del avión de combate disminuye la velocidad, vuela junto al Boeing en formación y saluda al piloto del avión de pasajeros por radio:
Piloto Combate (P.C.): «¿Aburrido el vuelo?»
Piloto Boeing (P.B): ¿qué?
El piloto de combate, se invierte, acelera, pica el avión, monta rompiendo la barrera del sonido, sube rápidamente a una velocidad y altura vertiginosa, para después volver a descender casi al nivel del mar en una picada impresionante.
Reduce la velocidad y se vuelve a colocar al lado del Boeing y pregunta:
P.C.: «Bueno, ¿Que te pareció eso?»
El piloto de Boeing responde:
P.B.: «¡Muy impresionante, pero ahora mira tú!»
El piloto de avión de combate mira el Boeing, pero no pasa nada. El avión comercial sigue volando en forma recta y nivelada con la misma velocidad y actitud.
Después de cinco minutos, el piloto de Boeing dice por radio:
P.B.: «Bueno, ¿qué te pareció a ti ahora?»
El piloto del avión de combate pregunta confundido:
P.C.: «¿Pero, qué hiciste?»
El piloto comercial se ríe y contesta:
P.B.: «Me levanté del asiento, estiré las piernas, fui a la parte de atrás en el baño, tomé una taza de café, comí una rosca de canela e hice una cita con la azafata para las próximas tres noches, en un Hotel 5 Estrellas, que es pagado por mi empleador”.
*La moraleja de la historia es:*
Cuando eres joven, la velocidad y la adrenalina parecen ser excelente compañía. Pero a medida que se envejece y se hace más sabio, el confort y la paz tampoco deben ser menospreciados.
Esto se llama S.O.S.: Más lento, más viejo, más inteligente (en inglés Slower, Older, Smarter).
Dedicado a todos mis amigos que, como yo se acercan o ya han alcanzado el S.O.S.
…
